Maldita fotocopia del DNI...

Muchos os habréis preguntado alguna vez: ¿por qué, cuando vamos a hacer una gestión a una administración, nos piden la fotocopia del D.N.I., si ellos poseen esos datos mejor que nosotros mismos? Sin ir más lejos, para pedir una subvención al Ministerio de Educación, he tenido que acreditar mi título universitario con un documento compulsado: ¿pero por qué narices no miran en sus bases de datos y lo averiguan? Pues bien, a partir del año que viene el Estado ya no volverá a reclamar ni una copia del D.N.I. ni de otros certificados, como el empadronamiento. Por supuesto, las ventajas no son sólo para nosotros, acabáramos:

En total se dejarán de hacer 4 millones de fotocopias que cada año exige la Administración del Estado a los ciudadanos para cualquier papeleo. También se ahorrarán 3 millones y medio de certificados de empadronamiento, que piden la Seguridad Social u otros organismos estatales anualmente.

Y es que eran ganas de gastar el dinero de nuestros impuestos en la destrucción del Amazonas :(. Entre estas medidas y las que nos afectan como consumidores, parece que a nuestros gobernantes sólo les queda tocar temas menores para tener todo atado: sanidad, vivienda, empleo... en fin, menos da una piedra.