Por qué, por qué los domingos por el fútbol me abandonas?

Los hombres, según unos científicos británicos, van al fútbol para dar rienda suelta a toda su emotividad, a identificarse con el otro, a alcanzar un grado de unión mística...

Cuando los hombres se abrazan unos con los otros, se busca a aquellos que comparten una misma identidad. Se busca a aquel que "verdaderamente ha sufrido las vicisitudes de ese equipo. Hay una especie de unión mística. Se busca al que comparte al mismo Dios"
"No hay misticismo sin cuerpo. La emoción física siempre está presente. En el fútbol hay un sustituto, un sucedáneo de la experiencia religiosa"
"En el acto de la masa, en relación con el fútbol, hay tal liberación de las pulsiones que provoca que se pierda interés por otras cosas, así que la libido va toda al partido del fútbol".

Vamos, fútbol, religión y sexo. Buen invento éste: los tres grandes motores, todos unidos en un campo, movidos por once jugadores, sentidos por una afición...
Y sobre todo lucrativo, muy lucrativo...
En fin! Nada que no supiéramos...

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